HELIANTHUS TUBEROSUS

HELIANTHUS TUBEROSUS. (TUPINAMBO, TUPINAMBOS, PATACA, AGUATURMA, ALCACHOFA DE JERUSALÉN, CRIADILLA DE AGUA, CASTAÑA DE TIERRE, MARENQUERA, AJIPA, BATATA DE CAÑA, BATATA TUPINAMBA, PAPA DE CAÑA).

De esta planta he puesto el nombre científico porque creo que por Andalucía no tiene ningún nombre popular, aunque en otros lugares del mundo es muy conocida.

Se trata de otra de esas plantas de altísima calidad debido a la gran cantidad de beneficios al cultivarla frente a las pocas exigencias.

Finales de octubre o principios de noviembre es un buen momento para arrancarlas de raíz (se trata de un tubérculo comestible del color del rábano) o cortarlas. De cualquiera de las dos maneras volveremos a tener margaritas al año siguiente. Estarán desaparecidas durante todo el invierno, pero en junio volverán a brotar unos tallos y horas tomentosas (con pelo) que pueden llegar a medir hasta tres metros de alto si tiene agua suficiente. Florecerá en otoño, por lo que no será exigente con el agua (las plantas que florecen en verano suelen ser más exigentes en una época difícil de aportar el agua necesaria), y su floración será muy abundante.

No sufre enfermedades, no es muy exigente con el agua, pero se puede regar mucho y crecerá más, y no se convierten en una plaga pues se pueden exterminar sin gran dificultad. La planta no es muy compacta pero en conjunto puede formar macizos interesantes. La floración es espectacular.

LAVANDA

REPRODUCIR EN OTOÑO-INVIERNO.
Octubre es un buen momento para reproducir las lavandas. Se pueden plantar directamente en el lugar donde van a estar definitivamente porque no se van a ver afectadas por el frío del invierno. Cuando llegue el verano habrá que regarlas, pero solo el primer año, porque el segundo año ya tendrán una gran capacidad para soportar el calor y la sequía y además estaremos hablando ya de una planta adulta que florecerá y sus flores permanecerán durante meses. La flor de la lavanda puede dejársele en el tallo hasta que esté seca y ésta seguirá estando tan bonita al final como al principio.

No es atacada por ninguna enfermedad, ahuyenta al pulgón, su aroma es delicioso y es muy poco exigente. Es ideal para un jardín bello sin necesidad de trabajarlo mucho.

CALÉNDULA

Es la plánta más versátil y resistente que he conocido en mi vida. Florece en cualquier época del año, se autosiembra continuamente, se puede reproducir en cualquier estación. Por otro lado, también es fácil exterminarla, lo que evita que haya que clasificarla como plaga. Puedes conseguir una bordura en plena floración en solamente cinco semanas desde que siembras las semillas. Yo he plantado una hilera de caléndulas y a los cuatro días exactos ya habían brotado todas las semillas. A las cuatro semanas ya estaba la bordura formada, y a la semana siguiente ya estaba en plena floración.

La mala noticia es que se trata de una planta anual-bianual por lo que no sé exactamente si podrá haber una continuidad o no. Ya iré ampliando el comentario sobre la superpersistente CALÉNDULA.

CICLAMEN

Aunque no está tan extendida como otras plantas de adorno (pensamiento, petunia etc) el ciclamen es una planta superresistente que en La Yedra podría crecer en las cunetas. Su raíz es un tubérculo y aunque en algún momento del año te parezca que la planta ha muerto, no es así. Cuando menos te lo esperes volverá a nacer y se llenará de flores de nuevo. En la época de descanso puedes partir el tubérculo en varias partes y tendrás varias plantas en la nueva temporada.

ALIGUSTRE

PODAR A FINALES DE AGOSTO O PRIMEROS DE SEPTIEMBRE.
Los aligustres, que abundan en las calles de las ciudades (LIGUSTRUM JAPONICUM), crecen solos. Se adaptan a la temperatura de invierno así como a la de verano sin quejarse jamás. Se reproducen solos por semillas; de vez en cuando te encuentras uno por algún ricón de tu jardín y con solo darle un tironcito ya lo has sacado de la tierra con raices y agarrará allá donde lo pongas. No son atacados ni por hongos ni insectos, su hoja es perenne, son bastante limpios (solamente tiran unas bolitas negras al suelo, pero es poca cosa). En fin, una planta de alta calidad.

Si quieres que estén compactos y siempre verdes los debes recortar una vez al año durante los primeros años y después cada dos o tres años. La mejor época para hacer esto es la última semana de agosto y las dos primeras de septiembre. El motivo es que haciéndolo en estas fechas el árbol tendrá tiempo para poblarse de hojas verdes antes de que lleguen los fríos, de esa manera no pasarán todo el invierno con el tronco pelado, ya que no quedan muy bonitos cuando están recién recortados. Si atrasas la poda hasta octubre tus aligustres pasarán hasta primavera con el aspecto de recién cortados y además, correrán más peligro de morir.